miércoles, 27 de junio de 2012

Cómo es la tristeza

La tristeza es intentar mirar hacia delante y no ver más que un túnel negro; es pasar al lado oscuro de la luna; es sentir una losa encima del lomo que no te deja avanzar.

Los humanos lo llaman bajón, y si dura, depresión.

Puede haber dos tipos de depresión: las intrínsecas y las extrínsecas.

Llaman íntrínsecas a aquellas que no se originan por un motivo claro. Cuando no ha pasado nada en tu entorno de la suficiente magnitud como para hundirte. Esas las tienen que tratar los especialistas, aunque no es una dolencia muy común en los perros.

Las extrínsecas son más habituales. Tienen una causa, o varias, claras y definidas (aunque a veces te cueste encontrarlas o a otros les parezcan tonterías). Me hablaron de un perro que se metió debajo de la cama y no quería ni salir de ahí, ni comer; le habían cortado el pelo por primera vez en su vida y no lo llevó bien. Para él era importante. Otros nos entristecemos cuando somos castigados, despreciados, apaleados o abandonados, o incluso cuando nos dejan un rato solos. Las causas de nuestra tristeza no son muy variadas.

Pero nuestros humanos lo tienen más complicado.

En estos tiempos duros que les está tocando vivir es muy fácil que se entristezcan y vean solo un túnel negro al levantar la vista. Nuestra obligación, como sus mejores amigos, es conseguir que se olviden de lo complicada que es su vida de humanos, aunque solo sea por un momento.

Es importante hacerles ver que el único sistema para salir del lado oscuro de la luna es fijarse en la luz de lo bueno que les rodea; analizar lo que es verdaderamente importante, lo que tiene valor más allá de lo material. Tenemos que enseñarles que, después de caer, hay siempre que levantarse, pero con la cabeza erguida porque la dignidad es lo último que tienen que enterrar.

La vida son etapas y cuesta pasar de una a otra porque es el momento propicio para reflexionar sobre la incertidumbre del futuro. Pero, muchas veces, aunque parezca que vas hacia atrás, solo estás tomando impulso para saltar hacia delante.

Yo misma cambié a mi novio Baco por Lola. Pasé mucha angustia por las posibles repercusiones de mi decisión, estuve triste y decaída, pero ahora ya me encuentro en otra etapa de mi vida...

¡y estoy la mar de feliz!




5 comentarios:

Mamita de Karolinka dijo...

Gracias Sura.
Sí que estamos atravesando momentos difíciles, sí, y entonces cuesta mucho pensar y ver las cosas positivas que te rodean, y creo que cuesta mucho más pensar en que esta etapa "baja" es para coger impulso y pasar a otra "alta y buena".
En fin, lo intentaremos.
Yo me refugio en mi Carolinka, que ya sabes que me hace desconectar quiera o no quiera, y ella sí que hace realmente que me dé cuenta de las cosas que son importantes en la vida.
Gracias por estos consejillos,
PD: Mira que salís guapas las dos en ese corazón!!, eres una máquina con el photoshop!!!

Sura Hermosura dijo...

Muac!

tor dijo...

oooh, Suriña, que bonito, a nosotros tambien nos vienen muy bien esas palabras porque intrinseca o no a veces mi amita tambien se pierde en su tristeza y me vuesta un poco tirar de ella, pero tan pronto ve que se pierde en sus emociones hace lo que sea para recuperar el optimismo, ahora me está leyendo un libro que le habla de vivir cada momento intensamente desde comer una mannzana hasta los momentos malos , yo se lo que intenta ya que para mí es fácil pues es mi estilo de vida, así que VIVE LA VIDA!!!
También me habló, que cuando un perro llega con muchos nudos tantos tantos que hasta tiene heridas y luego lo rapas se sienten muy raros puede ser eso lo que le pasó a tu amigo, o si no que dio con una peluquera que no le gustaban mucho los animales y no era muy docil con el, ya que si nos tratan bien da igual qe nos rapen nos quiten los nudos si nos dan una buena racion de cariño y alguna gominola al terminar... dile a tu amiga qe mi amita va a su casa a hacerlo cuando le vuelva a hacer falta, seguro estaria mucho mas tranquila un lameton enooooooooooorme

Anónimo dijo...

La tristeza es que a pesar de levantarte cada vez que caes, de sonreír cada vez que te aprisionan el alma, de luchar por ser feliz relativizando lo negativo e impulsando lo positivo...a pesar de todo ello, acaba llegando el momento en que ya no puedes hacer nada porque ya no depende de ti, y ese es el momento de la verdadera tristeza

Sura Hermosura dijo...

Ya veo que te has levantado después de caer, que has sonreido apesar de tener el alma aprisionada, que has luchado por ser feliz relativizando lo negativo... está claro que sabes luchar. Así que deja de mirar el cuenco medio vacío porque también sabes verlo medio lleno.
Si ya no depende de ti, es el momento de pensar en empezar a adaptarte a la nueva situación y buscar otros caminos, mirando más allá de la tristeza.
Te lo dice una perra que fue abandonada, y que pasó un mes vagando por el monte. Fueron los peores días de mi vida,los más oscuros... y ya ni mi acuerdo de ello...